Hoy en día, unos dientes bonitos son garantía de éxito en muchos ámbitos. La salud dental ha sido una prioridad durante las últimas décadas o incluso siglos; Unos dientes bonitos, uniformemente dispuestos y de un blanco brillante juegan hoy en día también un papel en el ámbito privado y profesional. Dado que los dientes sanos y visualmente bellos se han vuelto tan importantes en nuestra vida diaria, también hay un aumento de mitos, consejos bien intencionados y sabiduría popular que pretenden ayudar a mantener la salud y la belleza dental.
Pero es precisamente en este ámbito donde conviene ser cautelosos: algunos consejos y sabiduría popular resultan ser errores fatales y casi irreversibles. Descubra más sobre los conceptos erróneos comunes sobre la salud y la belleza dental en la publicación del blog de hoy.
Mitos en el ámbito del cuidado dental al cepillarse los dientes todos los días
No olvides cepillarte los dientes después de comer: ¿quién no conoce este dicho? Por supuesto, es importante cuidar y cepillar los dientes regularmente, pero dos veces al día es suficiente. Lo ideal es cepillarse los dientes por la mañana después de levantarse y por la noche antes de acostarse. Nunca debes cepillarte los dientes inmediatamente después de comer. Especialmente después de comer alimentos dulces y ácidos, debes darle a tus dientes un descanso más prolongado.
No presione demasiado fuerte al cepillarse los dientes, ya que esto también puede causar daños permanentes en los dientes. Si te cepillas agresivamente, vas eliminando poco a poco el esmalte protector de los dientes. Esto también pone una tensión innecesaria sobre las encías.
Incluso los movimientos circulares no son tan efectivos a la hora de limpiar como siempre se anuncia. Con movimientos de sacudidas y caricias los dientes se limpian mucho más a fondo. La mejor manera de eliminar las bacterias que se han acumulado entre los dientes es con un cepillo de dientes ultrasónico. Sin frotar ni realizar movimientos circulares se pueden eliminar todos los gérmenes de la boca de una forma muy sencilla y eficaz.
Mitos y conceptos erróneos sobre la caries dental y compañía.
El azúcar corroe los dientes: probablemente hayas escuchado esta afirmación antes. Es cierto que el azúcar es perjudicial para los dientes, pero el azúcar no corroe los dientes ni el esmalte dental sensible. El azúcar no ataca directamente. Más bien, son bacterias las que se alimentan del azúcar y, a través de sus productos de degradación, se encargan de que el esmalte dental sea atacado. Cuando las bacterias descomponen el azúcar, se crean productos metabólicos que finalmente conducen a la caries dental.
Otro mito es la afirmación de que la caries dental depende de la cantidad de azúcar consumida. El tiempo transcurrido juega un papel importante. El tiempo durante el cual el azúcar llega a los dientes y permanece allí es el criterio decisivo. Por ello, los refrescos y los dulces también favorecen la caries dental, ya que los residuos permanecen más tiempo en la boca.